estados emocionales
ESTADOS EMOCIONALES
El combatiente, al encontrarse en una situación de esta naturaleza, sufre una conmoción que desemboca en los siguientes efectos:
- Falta de seguridad, lo que le llevará al desaliento y, como consecuencia, a una actividad pasiva e indolente.
- Sentimiento de desamparo e inferioridad, a causa del miedo, el dolor, las heridas, etc.
- Impotencia, al no conocer la solución.
- Pérdida de la noción del tiempo, al despreocuparse del mañana pensado en cómo subsistir cada día.
Es necesario que el combatiente conozca en cada caso:
- Cómo reaccionar ante las diferentes situaciones.
- Qué significan esas reacciones, sentimientos, expresiones y síntomas externos.
- Cuáles son los límites de su tolerancia y cuál es su actitud en esas situaciones.
- Cómo se debe controlar.
Siempre se correrán dos peligros graves:
- Desatender las necesidades básicas, cayendo en la comodidad.
- No planear y permanecer pasivos.
El buscar la comodidad puede ser una actitud positiva siempre y cuando ello no signifique caer en la indolencia. Hay que tratar de adaptarse al calor, la sed, el hambre, dolor, falta de higiene, incomodidades, etc., luchando por superarlas.
En circunstancias adversas, se está expuesto a una serie de tensiones y necesidades, además de las básicas ya mencionadas, tanto emocionales como físicas, que influyen en agravar el estado de desequilibrio psíquico.
Estas tensiones pueden ser producidas por:
- el miedo,
- la soledad,
- la desmoralización,
- el nerviosismo,
- el dolor, las heridas, la enfermedad,
- el cansancio, la sed, el hambre, el sueño,
- el frío, el calor.
Como consecuencia de las tensiones surgen las siguientes necesidades: